lunes, 11 de diciembre de 2006

los libres de pecado te matan a piedrazos


Ya que el crimen de Río IV está en todos los medios, fijemos posición. Si todos hablan , opinan, sentencian, condenan, imaginan, miremoslos un poco a ellos , los condenadores.


Lo mas interesante del caso de esta señora asesinada, es el comportamiento conservador, hipócrita, profundamente machista , de los medios de comunicación.


La lapidación de la mujer adultera es una practica abandonada en occidente y ha merecido airadas condenas por algunos incidentes de ese tipo en Afganistan e Iran (foto)en los últimos años.


Sin embargo, en Córdoba por lo que se sabe asesinaron a una mujer y nadie habla del asesino , todos la juzgan a ella, porque parece que era infiel.


No tenia cuentas con la justicia, no hay vecinos o amigos que la critiquen, no traficaba, no abandonó a sus hijos , no tiene manchas en su vida pública...pero era adultera.


Si el muerto hubiera sido el varón, nadie lo juzgaría. No se hablaria de su moral , no se le contarían las amantes, nadie tendría interés por saber que hacia con la vaselina de la mesita de luz.


Pero es una mujer. Entonces no importa que haya un asesino suelto, no importa si este es un episodio de violencia de género donde alguien se cree dueño del cuerpo de la mujer libre. No importa nada: La juzgan a ella, la incriminan a ella, la victima se convierte en victimaria de una sociedad que no puede tolerar el adulterio de la mujer.


Si el asesino tiró la primer piedra, el resto de la sociedad - que se siente libre de pecado - se pelea por tirar la ultima.


Esta doble victimización es comun en todos los sectores sociales en casos similares. Pero esta vez hay algo de fiesta, de circo romano que apabulla. Las especulaciones de todos los medios (todos) sobre las practicas sexuales y el perfil sicologico de la victima y no del asesino pasan largamente lo escandaloso.


Además , todos los medios han incorporado en estos dias notas politicamente correctas, pero siguen tratando el tema de la misma manera.


Pobre mujer. Le tocó un asesino y la lapidación mediatica, y solo - solo - era adultera.



3 comentarios:

Fede dijo...

Es cierto que el asesino de doña Dalmasso debe estar asombrado por lo poco que es buscado o condenado por la opinión pública.
Pero creo que aparte del costado machista de husmear la agenda de la pobre Nora, es principalmente la cuestión de espiar al "promiscuo", hacer un reality de un matrimonio infiel, sea cual sea el protagonista.
Si el hombre hubiera sido asesinado se lo trataría en los medios como se trata en el café de la esquina al picaflor, de modo machista y cómplice, pero no como una víctima.
La noticia es la infidelidad, en ningun momento el crimen.
Por lo menos...así, lo veo yo.

larazonbuscapleitos dijo...

Leo tu análisis, voy a la referencia de DSD Zona Dura. Vuelvo y aquí sigo. Me alegra la autocrítica del periodismo sobre su tarea profesional. Me sorprende que se haya expuesto en los propios medios casi encima de los hechos mismos, lo cual abunda sobre la profundidad de la herida en la medida que evita la “necesaria imparcialidad que el tiempo brinda”. Esta circunstancia debería pegar fuerte en ciertos medios: cuidado con estos muchachos que sienten que la ética profesional debe ser atendida como el mejor activo de la familia . Atención !!!: tal vez estén en la vereda correcta.

Tu análisis: correcto y preciso con relación a lo comentado mas arriba. La segunda nota da un giro y se mete de narices con esta sociedad machista que nos muestra hasta donde puede involucrarnos en su “violencia de género”. En este contexto, la referencia a la lapidación femenina es un ejemplo del caso límite o de frontera que “nockea” u obnubila nuestras neuronas para forzar la aceptación de un concepto o idea. Nada tan malo por cierto; los cuentos de mi infancia tienen bastante de esta técnica lo cual prueba su antigüedad y pertinencia. Entonces me pregunto si estamos en una sociedad machista, o en todo caso, en que nivel de “machismo” nos encontramos. Algunos ejemplos: sentencias en el ámbito del derecho de familia donde los “machos” son denunciados públicamente por abandónicos, mujeres separadas que deben hacerse cargo de la manutención de los hijos – ejemplo muy interesante porque a simple vista suena como un contraejemplo- etc. En el fuero civil se ha alcanzado la igualdad de género, y en otros tantos ejemplos normativos se transita el mismo camino, en general apurando el tranco como para no parecer demodé. Y en los medios no te cuento; me remito a “Alexandra Rampolla” enseñándonos a gozar en pareja, donde pareja es eso: iguales en la cama y en la vida. Y podemos seguir con las fiestas de mujeres en locales especiales donde el hombre aparece como un verdadero objeto sexual, subordinado a los más “bajos instintos” femeninos. Y la onda swinger mas extendida de lo que se cree donde los actores iguales se imponen. En fin, nuestra vapuleada cultura occidental nos sigue ofreciendo signos de vitalidad, de decadencia según otros, en una dirección donde no cabe duda que poco queda del machismo que emerge de tus líneas .
Acuerdo mas con el enfoque de nuestro polemista fiodor80 quien relativizando tu apuesta la restringe a la no menos interesante cuestión de “ espiar al "promiscuo", hacer un reality de un matrimonio infiel, sea cual sea el protagonista”.
Bueno adivinador, por lo demás: precisa tu nota de la fecha sobre “Veintitrés” y Macri. Seguiremos en contacto.

jorge gómez dijo...

La razon buscapleitos..Tu comentario esta tan bien escrito que me quedé en el placer de la léctura y tardé en darme cuenta cuenta que no estabas de acuerdo conmigo,
Ese es el sentido del blog.
Si esto se convierte en un espacio de reflexión habremos tenido éxito. Prometo una entrada sobre los dos temas que identifiqué (el machismo de la sociedad y la autocritica del periodismo) para seguir aprendiendo.
Gracias.