martes, 1 de mayo de 2007

Un lugar para charlar en las veredas


Hoy, 1 de Mayo, fuimos a Chacabuco a llevar a su casa a la perrita de la buena suerte.

Estuve una hora en el pueblo, pero me sorprendieron los bancos en las puertas de las casas. Varias casas por cuadra tienen en la vereda bancos de plaza, sillas, lugares para sentarse a charlar.

Tal vez sean retazos de otro tiempo, o realmente lleven otra vida los habitantes de Chacabuco.


En todo caso, es hermoso pensar en ocupar el espacio publico charlando con el vecino. Construir mi casa y poner en la puerta un banco, para sentarme a conversar.

Convertir la vereda en un patio común.

Ahora, que esta tan de moda encerrarse y dejarle el espacio publico a la policía y los ladrones, mi hija y yo descubrimos que en Chacabuco el plan - por lo menos desde la arquitectura - es sentarse en la vereda.

Nos gustó pensar eso. Y volvimos con la idea de sacar las sillas y ponernos a hablar de nada.

Saludar a los que pasan, preguntarles por la familia, sonreír y hacerse amigo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Soy nacida en un pueblo vecino a Chacabuco, tengo familia en Chacabuco (Alejandro Ierolano de Haras Los Angeles) y conozco perfectamente lo que significa "la vereda" en cualquier pueblo de provincia.

Ud cuenta Adivinador que con su hija llevo una perrita, seguramente no pudo elegir mejor destino. Si el habitat del animalito es el pueblo muy pronto será conocida por los vecinos por su santo y seña y si la llevan al campo va a ser muy "feliz" ya que podrá desarrollar su instinto de manera insospechada.

Como ud. dice la vereda es el patio común y para las mascotas de los pueblos esto también es aplicable. Mi madre vive en un pueblo vecino y en su casa conviven en perfecta armonía su gato Manano, sus gallinas, su conejo, un gato de la calle que sufre una invalidez y también son invitados permanentes las gatas de la vecina, los teros del vecino de al lado, el gato de enfrente y el perro del dentista de la otra cuadra. También el gato de mi madre es bienvenido en la casa de los vecinos. Estas cosas en la gran ciudad no ocurre.

Le comento esto proque mi perro GUAU, único testigo del asesinato de mi padre, también tuvo por destino un campo en Chacabuco y es por todos reconocido por su habilidad en cuidar majadas, cosa que pacientemente mi padre y mi tío le enseñaron.
Viajo seguido a esa zona y hace poco tiempo me lleve una grata sorpresa cuando en una emisitón del Canal 4 de TV local pude verlo acompañando a una quinceañera en su feliz recorrido rumbo a la fiesta. (En los pueblos este recorrido se hace a pie, para lucir a la niña)

Chacabuco también es la cuna de mi yegua Bonita y de su hija Estrellita.

Seguramente, si tanto ud. como su hijita buscaron el bienestar de la perrita, quedense tranquilos, en Chacabuco lo habrá encontrado.

Felicitaciones por haber elegido un pueblo con gente tan cálida como Chacabuco.


Calandria

Anónimo dijo...

4 palabras:
FOR
MI
DA
BLE

tono intimista del bloggero
tono confidencial del comentario
resultado:
deleite para el lector

Se ponen de acuerdo?

me gusta lo que sale



A vos te digo, El de siempre